jueves, 16 de septiembre de 2010


LA SABIDURÍA DEL SILENCIO


Habla simplemente cuando sea necesario. 
Piensa lo que vas a decir antes de abrir la boca. 
Sé breve y preciso ya que cada vez que dejas salir las palabras por la boca dejas salir al mismo tiempo parte de tu vitalidad. 
Desarrolla el arte de hablar sin perder la energía. 
Nunca hagas promesas que no puedas cumplir.
No te quejes y no utilices en tu vocabulario palabras que proyecten imágenes negativas porque esto producirá alrededor de ti todo lo que has fabricado con tus palabras cargadas de intención.
Si no tienes nada verdadero, nuevo y útil que decir es mejor quedarse callado y no decir nada.
Aprende a ser como un espejo, escucha y refleja la energía. El Universo mismo es el mejor ejemplo de espejo que la naturaleza nos ha transmitido porque el Universo acepta sin condiciones nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestras palabras, nuestras acciones y nos envía el reflejo de nuestra propia energía bajo las formas de las diferentes circunstancias que se presentan en nuestra vida.
Toma un momento de silencio interno para considerar todo lo que se presenta y toma tus decisiones después, así desarrollarás la confianza en ti mismo y en la sabiduría.
Evita el hecho de juzgar y de criticar a la gente. El Tao es imparcial y sin juicios, no critica, tiene una compasión infinita y no conoce la dualidad. Cada vez que juzgas a alguien lo único que haces es separarte, expresar tu opinión personal. Es una pérdida de energía, puro ruido.
Deja que cada cual resuelva sus propios problemas y concentra tu energía en tu propia vida. Ocúpate de ti mismo. No te defiendas. Cuando tratas de defenderte estas dando demasiada importancia a las palabras de los otros y das más fuerza a sus opiniones. Si aceptas el no defenderte estás mostrando que las opiniones de los demás no te afectan, que “escuchas”. Que son simplemente opiniones y que no tienes que convencer a los otros para ser feliz.
Tu silencio interno te vuelve sereno. Haz regularmente un ayuno de la palabra para volver a educar al ego. Practica el arte de no hablar.
Progresivamente desarrollarás el arte de hablar sin hablar y tu verdadera naturaleza interna reemplazará tu personalidad artificial dejando brotar la luz de tu corazón y el poder de la sabiduría el “silencio”. Gracias a esta fuerza atraerás hacia ti todo lo que necesitas para realizarte y liberarte. Así pues, quédate en silencio.
Cultiva tu propio poder interno.
Respeta la vida de los demás y de todo lo que existe en el mundo. No trates de forzar, manipular y controlar a los otros. Conviértete en tu propio maestro y deja a los demás ser lo que son o lo que tienen capacidad de ser.
Instálate en el silencio y la armonía y sigue la vida sagrada del Tao.

Fuante : taichi-bodhisattva.org 
Traducción directa del chino, enviada por Guillermo Leyva, Profesor de Tai Chi Chuan , Qi Gong (Chi Kung) y Prácticas de Meditación Taoísta.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Entrevista al Dr. Jorge Carvajal


Entrevista al Dr. Jorge Carvajal
Médico Cirujano de la UNIVERSIDAD DE ANDALUCÍA - ESPAÑA 
Pionero de la Medicina Bioenergética
Marzo 10, 2009 
 

¿Qué enferma primero, el cuerpo o el alma? 
El alma no puede enfermar, porque es lo que hay perfecto en ti, el alma evoluciona, aprende 
En realidad, buena parte de las enfermedades son todo lo contrario: son la resistencia del cuerpo emocional y mental al almaCuando nuestra personalidad se resiste al designio del alma es cuando enfermamos. 

La Salud y Las Emociones 

¿Hay emociones perjudiciales para la salud? ¿Cuáles son las que más nos perjudican? 
Un 70 por ciento de las enfermedades del ser humano vienen del campo de conciencia emocional. 
Las enfermedades muchas veces proceden de emociones no procesadas, no expresadas, reprimidas.
El temor, que es la ausencia de amor, es la gran enfermedad, el común denominador de buena parte de las enfermedades que hoy tenemos. Cuando el temor se queda congelado afecta al riñón, a las glándulas suprarrenales, a los huesos, a la energía vital, y puede convertirse en pánico

¿Nos hacemos los fuertes y descuidamos nuestra salud? 
De héroes están llenos los cementerios. Te tienes que cuidar. 
Tienes tus límites, no vayas más allá. Tienes que reconocer cuáles son tus límites y superarlos porque si no los reconoces, vas a destruir tu cuerpo. 

¿Cómo nos afecta la ira? 
La ira es santa, es sagrada, es una emoción positiva porque te lleva a la autoafirmación, a la búsqueda de tu territorio, a defender lo que es tuyo, lo que es justo.Pero cuando la ira se vuelve irritabilidad,agresividadresentimientoodiose vuelve contra ti, y afecta al hígado, la digestión, el sistema inmunológico. 

¿La alegría por el contrario nos ayuda a estar sanos? 
La alegría es la más bella de las emociones porque es la emoción de la inocencia, del corazón, y es la más sanadora de todas, porque no es contraria a ninguna otra. Un poquito de tristeza con alegría escribe poemas. La alegría con miedo nos lleva a contextualizar el miedo y a no darle tanta importancia. 

¿La alegría suaviza el ánimo? 
Sí, la alegría suaviza todas las otras emociones porque nos permite procesarlas desde la inocencia. La alegría pone al resto de las emociones en contacto con el corazón y les da un sentido ascendente. Las canaliza para que lleguen al mundo de la mente. 

¿Y la tristeza? 
La tristeza es un sentimiento que puede llevarte a la depresión cuando te envuelves en ella y no la expresas, pero también puede ayudarte. La tristeza te lleva a contactar contigo mismo y a restaurar el control interno. Todas las emociones negativas tienen su propio aspecto positivo, las hacemos negativas cuando las reprimimos

¿Es mejor aceptar esas emociones que consideramos negativas como parte de uno mismo? 
Como parte para transformarlas, es decir, cuando se aceptan fluyen, y ya no se estancan, y se pueden transmutar. Tenemos que canalizarlas para que lleguen desde el corazón hasta la cabeza. 
¡Qué difícil! Sí, es muy difícil. Realmente las emociones básicas son el amor y el temor (que es ausencia de amor), así que todo lo que existe es amor, por exceso o defecto. Constructivo o destructivo. Porque también existe el amor que se aferra, el amor que sobreprotege, el amor tóxico, destructivo. 

¿Cómo prevenir la enfermedad? 
Somos creadores, así que yo creo que la mejor forma es creando salud. Y si creamos salud no tendremos ni que prevenir la enfermedad ni que atacarla, porqueseremos salud. 

¿ Y si aparece la enfermedad? 
Pues tendremos que aceptarla porque somos humanos. También enfermó Krishnamurti de un cáncer de páncreas y no era nadie que llevara una vida desordenada. Mucha gente muy valiosa espiritualmente ha enfermado. Debemos explicarlo para aquellos que creen que enfermar es fracasar. El fracaso y el éxito son dos maestros, pero nada más. Y cuando tú eres el aprendiz, tienes que aceptar e incorporar la lección de la enfermedad en tu vida. Cada vez más personas sufren ansiedad. La ansiedad es un sentimiento de vacío, que a veces se vuelve un hueco en el estómago, una sensación de falta de aire. Es un vacío existencial que surge cuando buscamos fuera en lugar de buscar dentro. Surge cuando buscamos en los acontecimientos externos, cuando buscamos muletas, apoyos externos, cuando no tenemos la solidez de la búsqueda interior. Si no aceptamos la soledad y no nos convertimos en nuestra propia compañía, vamos a experimentar ese vacío y vamos a intentar llenarlo con cosas y posesiones. Pero como no se puede llenar con cosas, cada vez el vacío aumenta. 

¿Y qué podemos hacer para liberarnos de esa angustia? 
La angustia no se puede pasar comiendo chocolate, o con más calorías, o buscando un príncipe azul afuera. 
La angustia se pasa cuando entras en tu interior, te aceptas como eres y te reconcilias contigo mismo. La angustia viene de que no somos lo que queremos ser, pero tampoco lo que somos, entonces estamos en el "debería ser", y no somos ni lo uno ni lo otro. 
El estrés es otro de los males de nuestra época. El estrés viene de la competitividad, de que quiero ser perfecto, quiero ser mejor, de que quiero dar una nota que no es la mía, de que quiero imitar. Y realmente sólo se puede competir cuando decides ser tu propia competencia, es decir, cuando quieres ser único, original, auténtico, no una fotocopia de nadie. 
El estrés destructivo perjudica el sistema inmunológico. Pero un buen estrés es una maravilla, porque te permite estar alerta y despierto en las crisis, y poder aprovecharlas como una oportunidad para emerger a un nuevo nivel de conciencia. 

¿Qué nos recomendaría para sentirnos mejor con nosotros mismos? 
La soledad. Estar con uno mismo cada día es maravilloso. Estar 20 minutos con uno mismo es el comienzo de la meditación; es tender un puente hacia la verdadera salud; es acceder al altar interior, al ser interior. 
Mi recomendación es que la gente ponga su despertador 20 minutos antes para no robarle tiempo a sus ocupaciones. Si dedicas, no el tiempo que te sobra, sino esos primeros minutos de la mañana, cuando estás fresco y descansado, a meditar, esa pausa te va a recargar, porque en la pausa habita el potencial del alma. 

¿Qué es para usted la felicidad? 
Es la esencia de la vida. Es el sentido mismo de la vida, encarnamos para ser felices, no para otra cosa. Pero la felicidad no es placeres integridad. Cuando todos los sentidos se consagran al ser, podemos ser felices. Somos felices cuando creemos en nosotros, cuando confiamos en nosotros, cuando nos encomendamos transpersonalmente a un nivel que trasciende el pequeño yo o el pequeño egoSomos felices cuando tenemos un sentido que va más allá de la vida cotidiana, cuando no aplazamos la vida, cuando no nos desplazamos a nosotros mismos, cuando estamos en paz y a salvo con la vida y con nuestra conciencia. 
Vivir el Presente 

¿Es importante vivir en el presente? ¿Cómo lograrlo? 
Dejamos ir el pasado y no hipotecamos la vida a las expectativas de futuro cuando nos volcamos en el ser y no en el tener. Yo me digo que la felicidad tiene que ver con la realización, y ésta con la capacidad de habitar la realidad. Y vivir en realidad es salir del mundo de la confusión. 

¿Tan confundidos estamos, en su opinión? 
Tenemos tres ilusiones enormes que nos confunden. Primero creemos que somos un cuerpo y no un alma,cuando el cuerpo es el instrumento de la vida y se acaba con la muerte. Segundo, creemos que el sentido de la vida es el placer; pero a más placer no hay más felicidad, sino más dependencia. Placer y felicidad no es lo mismo. Hay que consagrar el placer a la vida y no la vida al placer. La tercera ilusión es el poder; creemos tener el poder infinito de vivir. 

¿Y qué necesitamos realmente para vivir?, ¿acaso el amor? 
El amor, tan traído y tan llevado, y tan calumniado, es una fuerza renovadora. 
El amor es magnífico porque crea cohesión. En el amor todo está vivo, como un río que se renueva a sí mismo. En el amor siempre uno puede renovarse, porque todo lo ordena. En el amor no hay usurpación, no hay desplazamiento, no hay miedo, no hay resentimiento, porque cuando tú te ordenas porque vives el amor, cada cosa ocupa su lugar, y entonces se restaura la armonía. Ahora, desde la perspectiva humana, lo asimilamos con la debilidad, pero el amor no es débil. Nos debilita cuando entendemos que alguien a quien amamos no nos ama. 
Hay una gran confusión en nuestra cultura. Creemos que sufrimos por amor, que nuestras catástrofes son por amor. pero no es por amor, es por enamoramiento, que es una variedad del apegoEso que llamamos habitualmente amor es una droga. Igual que se depende de la cocaína, la marihuana o la morfina, también se depende del enamoramiento. Es una muleta para apoyarse, en vez de llevar a alguien en mi corazón para liberarlo y liberarme. El verdadero amor tiene una esencia fundamental que es la libertad, y siempre conduce a la libertad. Pero a veces nos sentimos atados a un amor. Si el amor conduce a la dependencia es eros. Eros es un fósforo, y cuando lo enciendes se te consume rápidamente, en dos minutos ya te quemas el dedo. Hay muchos amores que son así, pura chispaAunque esa chispa puede servir para encender el leño del verdadero amor. Cuando el leño está encendido produce el fuego. Ese es el amor impersonal, que produce luz y calor. 

¿Puede darnos algún consejo para alcanzar el amor verdadero? 
Solamente la verdad. Confía en la verdadno tienes que ser como la princesa de los sueños del otro, no tienes que ser ni más ni menos de lo que eres.Tienes un derecho sagrado, que es el derecho a equivocarte; tienes otro, que es el derecho a perdonarporque el error es tu maestro. Ámate, sincérate y considérate.. Si tú no te quieres, no vas a encontrar a nadie que te pueda querer. El amor produce amor. Si te amas, vas a encontrar el amor. Si no, vacío. Pero nunca busques una migaja; eso es indigno de ti. La clave entonces es amarse a sí mismoY al prójimo como a ti mismo. Si no te amas a ti, no amas a Dios, ni a tu hijo, porque te estás apegando, estás condicionando al otro. Acéptate como eres; lo que no aceptamos no lo podemos transformar, y la vida es una corriente de transformación permanente. 

miércoles, 8 de septiembre de 2010


Relación entre la mente y el sistema inmune
* Dra. María de los Ángeles Rodríguez

Por años se ha tenido la evidencia de cierta asociación entre la mente y el sistema inmune. No es desconocida la relación entre la depresión, el estrés, y el cáncer. Por otro lado,  cada día generamos células potencialmente malignas y estas no proliferan en gran medida, porque existe un sistema inmune eficiente en eliminarlas. ¿Qué fenómenos deben ocurrir para que el sistema falle y se desarrolle un cáncer?

No cabe duda de que el desarrollo del cáncer no es un evento unifactorial, es probable que intervengan múltiples factores, pero es interesante mostrar algunas evidencias de la importancia del sistema inmune y su conexión con la mente, ya que en esta esfera se ha demostrado algunas prácticas que podrían ser útiles para ayudar a estos pacientes.

En primer lugar, el libro que a continuación se comenta, hace una completa revisión, aportando elementos de gran interés en este tema:


Las Moléculas de la Emoción
Libro de la Dra. Candace Pert
Profesora Investigadora del Departamento de Fisiología y Biofísica, Georgetown University Medical Center, Washington D.C.

El primer componente de las moléculas de la emoción es una molécula encontrada en la superficie de las células en el cuerpo y en el cerebro, llamado el receptor de opiáceos. Este descubrimiento fue el que lanzó la carrera científica de la Dra. Pert a comienzos de los 70. Todos los receptores son proteínas  y ellas se agrupan en la membrana celular esperando por las llaves químicas correctas para nadar hacia ellas a través del líquido extracelular y para ligarse a ellos mediante la adaptación como una llave a cerradura en un proceso llamado unión o ligazón. La llave química que se une al receptor es el ligando, al unirse se produce una alteración  que lleva a la molécula a reorganizarse, cambiando de forma hasta que la información entra a la célula. El ligando transmite el mensaje molecularmente al receptor. El receptor transmite el mensaje al interior de la célula, donde el mensaje puede cambiar dramáticamente el estado de la misma. Una reacción en cadena de eventos  bioquímicos es iniciada y dirigida por el mensaje del ligando, comienza numerosas actividades como síntesis de nuevas proteínas, división celular, apertura o cierre de canales iónicos, etc. En suma, la vida de la célula está determinada por qué receptores están en su superficie y si estos están ocupados por ligandos o no. El proceso de unión es un proceso muy específico.

Las tres áreas clásicamente separadas: neurociencia, endocrinología e inmunología y sus varios órganos: cerebro, glándulas, bazo, ganglios linfáticos y médula ósea están unidos entre ellos en forma multidireccional por una red de comunicación ligada por transportadores de esa comunicación conocidos como neuropéptidos.

El dolor: La zona gris alrededor del acueducto entre el tercer y cuarto ventrículo está llena de receptores de opiáceos relacionados con el control del dolor. En esta zona se encuentran receptores para prácticamente todos los neuropéptidos que han sido descritos. Se ha descrito que a través del cambio de la forma de la respiración, llamada respiración consciente se  produce un cambio en la cantidad y tipo de péptidos liberados desde el cerebro. Dado que muchos de estos péptidos son endorfinas (opiáceos naturales del cuerpo) se produce una disminución del dolor.

Mente y cuerpo: el cuerpo es inseparable de la mente. Los neuropéptidos y sus receptores están en el cuerpo y la mente está en el cuerpo. Ej: el intestino está lleno de receptores, la excitación y el enojo aumentan la motilidad intestinal y la contención la reduce.

El cerebro está bien integrado con el resto del cuerpo a nivel molecular. Es una red con el sistema neuronal, hormonal, gastrointestinal e inmune para comunicarse entre ellos vía péptidos o receptores específicos de los péptidos. Cada segundo ocurre un masivo intercambio de información en el cuerpo. Los neuropéptidos son los mensajeros que llevan esta información para ligar estos sistemas mayores en una unidad cuerpo-mente.

Salud y emociones
¿Hay relación entre la mente y las emociones y el estado de salud? Una de las formas como el sistema inmune afecta nuestra salud es la formación de placas en las arterias, las células del sistema inmune liberan péptidos que aumentan o disminuyen la construcción de la placa en los vasos coronarios. ¿Cuál es el rol de las emociones en todo esto? Se ha demostrado que aumentan los ataques cardiacos los lunes en la mañana y en periodos significativos como la Navidad.

Otra conexión del sistema inmune es con los virus que usan los mismos receptores de los neuropéptidos para entrar a la célula y depende de cuanto péptido haya alrededor del receptor y disponible para unirse al virus, éste tendrá mayor o menor dificultad para ingresar a la célula. Por siglos se ha dado mucha atención a la influencia de los procesos mentales y emocionales en la salud y enfermedad. Sólo en el siglo XX los investigadores han encontrado herramientas poderosas para demostrar estas uniones con el sistema inmune.

Robert Ader, Psicólogo de Rochester School of Medicine y Nicolás Cohen entrenaron ratones experimentalmente para asociar cierto estímulo con un evento, dar una droga inmunosupresora con sacarina, posteriormente se les dio sacarina sola y la respuesta también fue la supresión de la respuesta inmune. Mientras estos estudios han demostrado que el sistema inmune puede ser condicionado a nivel subconsciente, Howard Hall demostró en 1990 que el sistema inmune puede ser conscientemente controlado con las llamadas estrategias ciberfisiológicas. Prácticas autoregulatorias como la relajación, imaginería guiada, autohipnosis, entrenamiento de biofeedback .

Si el sistema inmune puede ser alterado por la intervención consciente, ¿Qué relación puede haber con el tratamiento de enfermedades como el cáncer? En 1940, Ranti afirmó que el cáncer resulta de una falla en expresar las emociones. En los 80, Lidia Temoshock, psicóloga, demostró que los pacientes con cáncer que esconden sus emociones tienen una recuperación más lenta. La supresión crónica de las emociones, resulta en un trastorno masivo de la red psicosomática.

En todos nosotros están creciendo células cancerosas en todo momento y las células Natural Killer las atacan y destruyen, un trabajo coordinado con varios péptidos del cerebro y sus receptores.

Todas las emociones son saludables, el enojo, el temor, la tristeza o emociones negativas, son tan saludables como la paz, la fuerza y la alegría; así, su represión, altera la integridad del sistema. La clave es expresar los sentimientos.

Virus VIH y sistema inmune
El virus VIH entra al linfocito T CD4, el cual tiene un receptor específico para el virus. Se ha encontrado receptores para el virus a nivel del cerebro, lo cual podría tener alguna relación con los trastornos neurológicos observados en los pacientes infectados. Se ha encontrado una molécula similar al CD4 en el cerebro, especialmente a nivel del hipocampo  y  la  corteza  cerebral.  Hay  datos  que  sugieren  que  el  receptor  de  CD4  puede  ser  un  receptor  de neuropéptidos. Si se encuentra un receptor natural del cuerpo que se ligue al receptor de CD4, se podría obtener una terapia no tóxica para impedir la entrada del virus a la célula.

El receptor de CD4 no es exclusivamente para unirse al virus. El GP120 de la envoltura externa del virus, es la parte que se une al receptor de CD4. Se ha logrado sintetizar una molécula capaz de unirse al receptor y así desplazar al GP120, se le ha llamado péptido T.

VIP: péptido intestinal vasoactivo, se le ha encontrado en la corteza frontal, en el timo, intestino, pulmones y algunas células del sistema inmune y del sistema nervioso autónomo. El virus competiría con el VIP por los receptores en la superficie de las células del sistema inmune y del cerebro y dependería de la cantidad de la molécula presente, la facilidad del virus para entrar a la célula (Proceedings Nat. Acad. of Science, Dic. 1986)

Posteriormente, se han identificado otros péptidos que hacen lo mismo.

El VIP es activo en el intestino, donde regula el flujo de agua y en el cerebro, donde promueve el crecimiento y salud de las neuronas. Cuando el GP 120 se une a las neuronas en el cerebro y altera la actividad del VIP, las neuronas mueren o pierden sus axones y dendritas, provocando los efectos de demencia observados en algunos pacientes con SIDA. El VIP también se encuentra en el timo y médula ósea, donde controla la maduración de los linfocitos responsables de un sistema inmune fuerte y sano. La ocupación del receptor por GP120, causa apoptosis o muerte celular programada, que es otra forma de decir que acorta el ciclo de vida normal de los linfocitos T CD4, resultando en un sistema inmune alterado y una mayor susceptibilidad a infecciones oportunistas, que causan la muerte de la mayoría de los pacientes con SIDA.  Para estos investigadores, el bloqueo del VIP por el GP120, resulta en una falla de las neuronas para crecer y de las células inmunes para madurar.

La emaciación (baja de peso), fue comprendida más tarde, usando la misma teoría, cuando se probó que el GP120 también se adapta y bloquea la hormona estimulante del crecimiento.

En la Fenway Clinic, en Boston, se hizo una investigación en 30 hombres y mujeres con SIDA, y se demostró la desaparición de algunos síntomas al administrarles el péptido T, los mismos resultados obtuvo otro grupo en Princeton.

Búsqueda de otros péptidos y su aplicación clínica
Si se pudiese interferir y bloquear receptores específicos del glutamato inmediatamente después de un accidente vascular cerebral, se lograría que las víctimas que hoy mueren o quedan permanentemente dañadas, podrían recuperarse. En pacientes con trauma cerebral o Accidente Vascular Cerebral, un neurotransmisor, que es el glutamato, sale de las neuronas y con el tiempo mata las células.

Posteriormente se demostró que el anestésico conocido como PCP (polvo de ángeles), usa como receptor el mismo que el glutamato que se necesita bloquear. Después de ardua investigación, se sintetizó un péptido llamado neuroprotectina, para ser usado en pacientes con trauma y accidente vascular cerebral.

Asociación de métodos alternativos a la terapia médica
En 1992, el National Institutes of Health, estableció la oficina de Medicina Alternativa, para investigar y evaluar muchas de las terapias alternativas, incluyendo acupuntura, homeopatía, técnicas de sanación manipulativas como quiropraxia, visualización y biofeedback.

La influencia de las emociones de la mente en la inmunidad 
Si sabemos que los pensamientos y sentimientos pueden influenciar una enfermedad, por qué no  expandir la investigación para determinar a qué enfermedades son más aplicables estas modalidades y efectuar experimentos para obtener respuestas que lleven a posibles curas. Por ejemplo, la imaginería guiada, es una de las modalidades que más allá de toda duda, puede influenciar la recuperación de los pacientes con cáncer.

El efecto de la meditación sobre el estrés y su impacto en la inmunidad, viene a corroborar la importancia de la conexión mente-cuerpo.

A fines de los 50, se demostró que al transplantar tumores a ratas sometidas a estrés, éstos crecieron más rápidamente. Esto se atribuyó a niveles elevados de esteroides, que suprimían la respuesta inmune. Cuando el estrés impide a las moléculas de la emoción fluir libremente, en un gran proceso autonómico, regulado por el flujo de péptidos, como la respiración, flujo sanguíneo, inmunidad, digestión y eliminación.

La meditación permite a los péptidos retornar al cuerpo y a las emociones a sanar.

Existe una nueva imagen integrada de cuerpo y mente, con inteligencia emocional y un alma espiritual. Cada uno de nosotros es un sistema dinámico, con un potencial para el cambio en el cual la autocuración es la norma, más que un milagro. Yo tengo el potencial para intervenir conscientemente en el sistema y tomar un rol activo en mi propia curación.

En el antiguo modelo reduccionista, enfermedades crónicas como las enfermedades cardiacas y el cáncer, son vistas como fuerzas atacando el cuerpo, haciéndonos víctimas inútiles, incapaces de cualquier respuesta fuera de la medicina altamente tecnológica.

La felicidad es lo que sentimos cuando nuestros bioquímicos de la emoción, los neuropéptidos y sus receptores están abiertos y fluyendo libremente a través de la red psicosomática, integrando y coordinando sistemas, órganos y células en un movimiento suave y rítmico. Fisiología y emociones son inseparables.

El hipotálamo es parte del cerebro emocional, el sistema límbico y sus neurotransmisores tienen axones que se extienden en la glándula pituitaria que está debajo. Estos axones secretan un neuropéptido llamado CRF (cortisol releasing factor, o factor liberador del cortisol), que controla la liberación de otra sustancia. Cuando el CRF actúa a nivel de la pituitaria, estimula la secreción de ACTH, que viaja a través del torrente sanguíneo a la glándula suprarrenal, donde se une a receptores específicos en las células.

La adrenalina producida en la suprarrenal, es la responsable de la respuesta al peligro, real o imaginario.  El estrés también aumenta con la mayor producción de esteroides. Se ha visto en niños  muy estresados, que los receptores se desensibilizan, escondiéndose y disminuyendo en número.

Impacto ambiental de toxinas y contaminantes
Los niveles celulares de metales pesados y dioxinas de herbicidas y pesticidas son 300 a 400 veces que la primera vez que se emplearon. Existe de 80 a 100.000 contaminantes químicos en nuestro ambiente. Los contaminantes ambientales pueden entrar en la membrana celular y cambiar la forma de sus receptores y esto podría afectar la transferencia de la información necesaria para hacer funcionar estos delicados sistemas.

Los contaminantes suspendidos en las membranas celulares, alterarían e interrumpirían el flujo de electrones, causando privación de energía, fatiga crónica, alergias y sensibilización química. 

Es alarmante el que los contaminantes acumulados en nuestro cuerpo, simulan y alteran la acción de nuestras hormonas sexuales: estrógenos, progesterona, testosterona. Impresiona la poca atención dada a la relación entre esta toxicidad y el cáncer de mama. Un informe reciente publicado en la revista Science, ha demostrado que toxinas ambientales estrógeno símiles, se unen a los receptores estrogénicos, donde pueden estimular el crecimiento del cáncer de mama. Igualmente, otras toxinas pueden actuar como la testosterona en el hombre e inducir cáncer de próstata. 

Es probable también que niveles elevados de toxinas ambientales estén causando alteraciones en la capacidad de nuestro sistema inmune.

Recomendaciones para mantener el sistema libre de toxinas
-      Altas dosis de vitamina C, 1000 o más mg/día
-    Dieta libre de polución
-    Evitar comidas procesadas
-    Consumir frutas y vegetales orgánicos
-   Evitar las carnes, cecinas y leches que están llenas de antibióticos. Elija los productos animales que han sido dejados crecer libremente.

Un cambio en el estilo de vida puede hacer la diferencia. La genética puede determinar la susceptibilidad a una enfermedad, pero el estilo de vida sano puede ser igualmente importante.

Estilos de vida sanos total y conscientemente: programa de 8 partes
Para muchos de nosotros, un estilo de vida sano significa alimentos bajos en grasas, ejercicio diario y eliminación del tabaco, el alcohol y otras drogas. Si bien, estas son estrategias que aumentan la salud, es necesario no perder el enfoque del cuidado emocional diario de nuestros pensamientos, nuestros espíritus y nuestras almas. A la luz del nuevo conocimiento acerca de las emociones y la red psicosomática, es obvio que ellas son también nuestra responsabilidad para manejar nuestra salud.

Nosotros tendemos a relacionarnos con los aspectos físicos para mantenernos sanos e ignoramos  la dimensión emocional, nuestros pensamientos, nuestros sentimientos, nuestros espíritus y nuestras almas.

Al escuchar nuestras emociones y dirigirlas a través de la malla psicosomática, ganamos acceso a su capacidad sanadora. ¿Cómo hacerlo? Primero reconociendo nuestros sentimientos y no solo los positivos, es solo cuando los sentimientos son negados, en que no pueden ser procesados y liberados, que se convierten en tóxicos.

1.- Hacerse conscientes
Es importante considerar que somos seres humanos y no hacedores y ésta es la decisión para hacernos más conscientes. Mientras más conscientes estemos, más podremos estar en contacto, en la conversación que va a niveles autonómicos o subconscientes de la unidad cuerpo-mente, donde se efectúan las funciones básicas como respiración, digestión, inmunidad, control del dolor y flujo sanguíneo. Solo entonces, podremos entrar en esta conversación, podremos usar nuestra alerta para aumentar la efectividad del sistema autonómico, donde la salud y la enfermedad están siendo determinadas minuto a minuto.

Se ha combinado la relajación, autohipnosis y visualización para ayudar a las personas a dirigir su propia curación. Es posible aumentar la producción de endorfinas mediante estas técnicas.

2.- Acceder a la red psicosomática
Es punto clave la corteza frontal, parte del  cerebro rica en péptidos y receptores. Esta es la localización de todas las funciones cognitivas superiores como la planificación del futuro, toma de decisiones y formulación de intenciones de cambio; en suma, es la corteza frontal la que nos hace realmente humanos. Esta parte del cerebro no se desarrolla completamente hasta los 20 años, lo que nos ayuda a entender y a ser más pacientes con nuestros adolescentes.

La corteza frontal es más dependiente del libre flujo de péptidos de la emoción, a través de la red psicosomática que cualquier otra parte del cuerpo.

El cerebro requiere de un combustible que es la glucosa y de un flujo sanguíneo que le asegure el abastecimiento de ésta. El flujo sanguíneo está muy regulado por los péptidos emocionales, que envían signos a los receptores en las paredes de los vasos sanguíneos para contraerse o dilatarse, influenciando la cantidad y velocidad del flujo. Sin embargo, si nuestras emociones están bloqueadas, se produce una contracción crónica del flujo sanguíneo, privando a la corteza frontal  como también otros órganos de este nutriente esencial. Lo anterior, nos deja menos alertas, limitados en nuestra capacidad de intervenir en la conversación entre el cuerpo y la mente y cambiar la fisiología o el comportamiento.

Al aprender a atraer nuestra atención a experiencias pasadas y memorias condicionantes almacenadas en receptores de nuestras células Ud. puede liberarse de estos bloqueos.

3.- Penetración en sus sueños
Una de las mejores formas de integrar alerta de las emociones es transcribir sus sueños. Los sueños son mensajes directos de su mente-cuerpo y nos dan una valiosa información de qué está ocurriendo física y emocionalmente. Haga el hábito de anotar sus sueños, más importantes que el contenido son los sentimientos y emociones que experimente.

4.- Mantenga contacto con su cuerpo
Es útil el uso de diferentes formas de trabajo corporal que usan el movimiento para sanar las emociones (Ej. Tai-Chi, Yoga, etc.).

5.- Reduzca el estrés
La forma más efectiva de lograrlo es la meditación, ya que ella permite aún sin estar totalmente consciente liberar emociones que están atascadas y que alteran el libre flujo de los bioquímicos de la unión mente-cuerpo. Se ha demostrado que la meditación puede reducir el dolor en pacientes con dolor crónico. Para algunos, la meditación proporciona una  unión directa con el mundo espiritual.
Juegue a pasarlo bien, ésta es la forma más fácil, barata y efectiva de reducir el estrés y rejuvenece su mente, cuerpo y espíritu.

6.- Haga ejercicio

7.- Coma en forma sana
Nuestro intestino delgado y el grueso están densamente cubiertos de neuropéptidos y receptores, todos intercambiando información con contenido emocional. Hay al menos 20 diferentes péptidos asociados a la emoción liberados por el páncreas para regular la acumulación y almacenamiento de nutrientes. Trate siempre de comer tranquilo y disfrute de la buena compañía. Evite el azúcar, como droga hace perder la sensibilidad a los receptores e interfiere con los mecanismos que regulan la disponibilidad de energía, como la liberación de glicógeno por el hígado.

8.- Evite las sustancias de abuso
Evite el abuso del azúcar, alcohol, tabaco, etc. Todas estas sustancias tienen análogos circulando que se unen a receptores.

Curación espiritual
Aquí estamos hablando del amor. Todos los curadores están recurriendo a una fuente de energía superior que llaman amor y que están compartiendo con aquel a quien sanan. El mensaje de Jesús es un mensaje de amor y compasión, los cuales siguen al perdón. Estos elementos deben ser el marco de nuestra medicina occidental.

No es posible continuar considerando al cuerpo como una máquina. Nosotros somos seres espirituales en un cuerpo físico y no de forma contraria. 

Se ha demostrado que es útil escribir las experiencias Ej. en víctimas de trauma. Se ha demostrado un aumento del flujo y fortalecimiento del sistema inmune que puede durar meses. También es útil la meditación y el ejercicio para el alivio del estrés. Existe una serie de técnicas que se pueden emplear para sanar  la mente y las emociones. El cuerpo es el campo de batalla de los juegos de guerra de la mente. Los pensamientos y emociones no resueltos, la negatividad que llevamos actúa en el cuerpo y nos hace enfermar. El perdón es una apertura del corazón  y aprendizaje a amar, esta es la lección más importante que debemos aprender. 

Existe mucha confusión  acerca  de cómo reconciliar la religión con procesos que ayudan a la curación, como el yoga, meditación, biofeedback, etc. Es importante considerar que hay muchas rutas para llegar al espíritu, como la meditación, sin negar la propia fe religiosa.

En suma, podemos decir que los pensamientos y las emociones vienen primero y luego le siguen los péptidos, causando apertura de los vasos sanguíneos Ej. producción de rubor.

Un pensamiento reduccionista es la visión  de que los pensamientos y sentimientos son productos de la actividad neuronal y que el cerebro es el primer motor, asiento de la conciencia. Las investigaciones han demostrado que el flujo de sustancias químicas viene de diferentes sistemas simultáneamente, el sistema inmune, el sistema nervioso, endocrino y gastrointestinal y que estos puntos nodales formados en estos sitios son  como parte de una gran autopista de intercambio de información interna a nivel molecular.

Sabemos que la información tiene una infinita capacidad de crecimiento y expansión y que esta es más allá del tiempo, lugar, materia y energía. Por ello, no pertenece al mundo material comprender nuestras sensaciones, pero debe pertenecer a su propio mundo, aquel que podamos experimentar como curación, la mente, el espíritu. Esto es lo que algunos llaman Dios.

En la Universidad de Georgetown se tiene un lema digno de recordar: “La persona es lo primero”.

Debemos recordar que Ciencia es la búsqueda de la verdad. En esencia, ciencia tiene muy poco que ver con competencia, control, separación, la verdadera  ciencia es unificadora, espontánea, intuitiva, preocupada del ser humano, en un proceso de entrega y no de dominación. La ciencia es un esfuerzo espiritual. Existe una inteligencia superior, una que viene a nosotros, va a nuestras moléculas y resulta de participación en un sistema mucho mayor que aquello que llamamos ego.

Los nuevos conocimientos de la física cuántica y la teoría de la información nos alejan del genio solitario y frío y nos llevan a un modelo de participación en la adquisición del conocimiento. La ciencia es la actitud de búsqueda de la verdad, la cual abarca los valores de la cooperación y comunicación basada en la confianza, tanto en nosotros mismos como en los demás.

En un artículo de revisión publicado en la Revista Médica de Chile de Marzo de 1999, se presenta el tema “Los opiáceos y el sistema inmune”, asumiendo la realidad de que por años, la experiencia clínica nos ha demostrado que pacientes sometidos a estrés o con estados depresivos son más propensos al desarrollo de enfermedades graves, lo que permite plantear la existencia de una relación entre el sistema  inmune y el sistema nervioso.

El funcionamiento adecuado del sistema inmune involucra la participación simultánea de diversas poblaciones celulares, esto requiere de una eficiente comunicación intercelular, donde las citoquinas desempeñan un importante papel. Las citoquinas son péptidos sintetizados principalmente por células del sistema inmune. Al interactuar con receptores específicos, desencadenan diversos eventos intracelulares que en conjunto comandan la progresión de la respuesta inmune. Las sustancias procedentes de otros sistemas como el endocrino o nervioso, también modulan eficientemente la respuesta inmune. Entre ellas podemos mencionar las catecolaminas, la hormona melatonina, los corticoides, así como los opiáceos entre otros. En el caso de los corticoides, se ha demostrado que ejercen su efecto inmunodepresor al inducir la expresión de un factor proteico inhibitorio, que es un importante factor transcripcional para muchos genes que participan en la respuesta inmune. En el caso de los opiáceos, la investigación se ha concentrado en determinar si ellos modulan eficientemente la respuesta inmune y donde se encuentran los receptores responsables de este efecto. Se habla de una inmunomodulación opiácea directa, donde los receptores opiáceos están presentes en las células del sistema inmune, y de inmunomodulación indirecta, siendo ésta consecuencia de la activación de receptores opiáceos del sistema nervioso, principalmente.

Es de interés conocer que uno de los opiáceos más comúnmente usados en clínica, la morfina, produce alteraciones inhibiendo tanto la respuesta inmune celular como humoral. Se destacan los efectos de los opiáceos sobre los linfocitos T y B, ambas células responsables de la inmunidad específica, así como los efectos sobre las células Natural Killer (NK), debido a la importancia de éstas en la eliminación de células tumorales.

De: Opioides y Sistema Inmune; Nuñez, Gastón y  Urzúa, Jorge. Revista Médica de Chile 1999; 127:341-348.

Otra publicación de interés en este tema fue publicada en The New England Journal of Medicine en Agosto de 1999 (The New England Journal of Medicine, 341 del 19/8/99). Este artículo, titulado “Turning brain into blood, Clinical applications of Stem Cells Research in Neurobiology and Hematology”, presenta la evidencia de una célula precursora común, neurohematopoyética. Se ha encontrado células derivadas de la médula ósea de donde normalmente derivan las células sanguíneas a nivel de la zona ventricular donde residen los progenitores del cerebro adulto. Cuando se alteran las condiciones de cultivo, las células se pueden diferenciar a neuronas de diferentes tipos. De modo inverso, se ha transplantado a un ratón subletalmente irradiado con células progenitoras neurales, clonadas con marcadores genéticos que hacen posibles diferenciarlas de las células del huésped y después de 5 a 6 semanas, se ha encontrado en el ratón células hematopoyéticas del donante, incluyendo linfocitos T y B, encargados de la inmunidad específica. Estas investigaciones, aún preliminares, nos dan otra evidencia de la  relación entre el sistema inmune y el sistema nervioso.

Resumen y traducción:
* Dra. María de los Ángeles Rodríguez, profesora de Hematología e Inmunología, Escuela de Medicina, Universidad de Valparaíso, Chile. Miembro, Sección de Hematología, Organización Mundial de la Salud, Ginebra, Suiza.