Judith Poole
Cuando se coloca la palma de la mano en un punto de acupuntura, uno espera un fuerte test kinesiológico* porque la palma es como el lado sur de un imán, que atrae o fortalece la energía. Por el contrario, cuando uno pone el dorso de la mano en el mismo punto, uno espera una respuesta débil. El dorso de la mano es como el lado norte del imán, que rechaza o dispersa energía. Esa diferencia se conoce como polaridad balanceada o apropiada; es lo que permite que fluya la energía vital.
Cuando está tensionado, hay varias maneras de que el flujo de la energía pueda estar afectado. Si su primera respuesta, cuando está bajo tensión, es querer controlar todo, es posible que la energía esté congelada o trabada. Es decir, puede probar fuerte con cualquier lado de la mano. Cuando la energía ha respondido de esta manera, uno puede divertirse haciendo preguntas que pueden resultar en un ‘no’ o en una respuesta incosistente. Uno puede tener una persona que dice “mi nombre es Barack Obama” o “ratón Mickey”. La energía señalará una respuesta afirmativa a cualquier pregunta que se plantee.
Para otros, la respuesta habitual a la tensión es mirar como si ellos estuvieran presentes cuando realmente están “fuera de cuerpo.” Es decir, su energía vital está sumergida, una configuración familiar en individuos que comúnmente reciben el nombre de “aspirantes a pilotos espaciales”. Es otra manera en que la energía vital del cuerpo responde para cuidar que uno se sienta seguro cuando las circunstancias son desconocidas. Esto genera una prueba kinesiológica “débil/débil” –esa es la respuesta que será débil tanto con la palma como con el dorso de la mano.
La tercera configuración ocurre a menudo cuando una persona se siente abrumada. Las inversiones de energía, como resultado de las pruebas de kinesiología son lo contrario de lo que esperaría uno: La prueba de energía fuerte para la palma de la mano y débil para el dorso de la mano. Las tres configuraciones de energía interrumpida son el resultado de la tensión, y las tres responden a la misma corrección(es). Al respecto, realmente no importa si la energía esté congelada, sumergida o invertida en términos de determinación de cómo tratarlo. Sin embargo, hay una ventaja al descifrar de que la manera la energía vital está desbalanceada. Con esa comprensión uno puede comenzar a reconocer sus patrones habituales y a comenzar a notar cómo uno se siente cuando su energía está bloqueada, sumergida o invertida. Eventualmente, con práctica, uno no necesitaría un médico para hacer una prueba para determinar cual patrón ha emergido.
La energía vital está constantemente respondiendo a nuestros pensamientos y sentimientos. Todos nosotros tenemos la flexibilidad para responder a las circunstancias con alguna de las maneras descritas arriba. El cuerpo se esfuerza siempre por estar en equilibrio energético. Son nuestras propias respuestas, nuestros pensamientos y sentimientos, conscientes e inconscientes, que nos cuidan temporalmente a partir de ese estado anhelado de homeostasis. Asimismo, cuando comenzamos a desarrollar un testigo interno, estamos más concientes de lo que estamos pensando y estamos sintiendo. Eso nos da energía, distancia, y capacidad para cambiar un pensamiento al vuelo, para cambiar cualquier sensación desagradable por una mejor y para llevar la energía vital del cuerpo a un nuevo estado de equilibrio.
El proceso es constante. Nunca se termina. No alcanzamos estasis o estancamiento, incluso en el sueño. La oportunidad se presenta así para desarrollar una vívida percepción de nuestro estado actual, como estima Richard Bartlett: el “aviso que notamos.” Cuando pensamos como un juego, podemos regocijarnos en las interminables posibilidades que esto presenta para ampliar la consciencia y el estado de atención. Se convierte en un ejercicio divertido, y las retribuciones son notables. La gente nos responde de modo diferente cuando nosotros guiamos nuestra propia energía y no pensamos que otros son responsables de cómo nos sentimos. Algunas frases claves en este sentido pueden probar que es útil: “Su opinión sobre mí no es de mi incumbencia.” “Qué su enfoque se amplíe.” y “no tome su vida tan personalmente.”
Según lo mencionado, la corrección es igual sin importar de que manera la polaridad en el cuerpo ha llegado a estar desequilibrada. Uno puede alumbrar una linterna en el punto; girar un imán de bajo gauss (que se pueda comprar en radio shack) sobre el punto; acercar o alejar su mano sobre el punto; o llevar todas las puntas de los dedos a un punto, entre un ¼ y ½ pulgada sobre el punto y girar hacia adelante y hacia atrás imitando el movimiento de dar vuelta a una llave. Cada uno de estos métodos cumple la misma tarea: retornar al estado normal la polaridad del punto en cuestión.
*La kinesiología es un método para probar el flujo de energía. A veces se le llama test del músculo, que es poco apropiado y puede causar confusión. La prueba no es sobre la fuerza muscular. Toma cierta práctica permitir que las energías del cuerpo se comuniquen directamente para conseguir una prueba exacta. Puede ser una sensación extraña de caída de brazos, y no sentir una necesidad de aparentar ser siempre fuerte.
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