Mantenga joven su cerebro
en sus años dorados
By Editorial Staff
El proceso de
envejecimiento es diferente para cada uno; sin embargo, los cambios son a
menudo similares – dolores y malestares se vuelven más prevalentes, el rango del
movimiento no es absolutamente lo que solía ser y tal vez usted también ha
notado cambios con su memoria.
Según el National Institute on Aging, tantos como
5 millones de americanos de 65 y mayores pueden tener la enfermedad de
Alzheimer, que lamentablemente no tiene en la actualidad una cura.
La enfermedad de Alzheimer es una enfermedad progresiva,
irreversible del cerebro que lentamente destruye la memoria y las habilidades
para pensar. Aunque no puedes detener este tren, puedes lentificarlo; las investigaciones
realizadas por la Alzheimer Association
sugieren combinar una buena nutrición con actividades mentales, sociales y
físicas puede ayudar a mantener la salud del cerebro. De hecho, en el 2014 la Alzheimer's Association International
Conference, un ensayo clínico de dos años de adultos mayores en riesgo de
deterioro cognitivo demostró que una combinación de actividad física,
orientación nutricional, entrenamiento cognitivo, actividades sociales y
gestión de los factores de riesgo de la salud del corazón desaceleró la
declinación cognoscitiva.
Si ya no eres
consciente de tus decisiones relativas a la dieta, a la actividad mental y social,
como también a la actividad física, quizá quieras considerar algunos cambios de
estilo de vida... nunca es tarde para empezar.
¿Cuál es su menú
semanal?
Los estudios[1]
demuestran que la dieta mediterránea, similar a una dieta baja en grasas y más
alta en vegetales y frutas, se ha asociado con la disminución de la declinación
cognoscitiva. También se sugiere que usted debe controlar su colesterol y
presión arterial, como una pobre salud con colesterol y presión arterial puede
aumentar el riesgo de cardiopatía y accidente cerebrovascular, que se cree contribuyen
al desarrollo de ciertos tipos de demencia (la enfermedad de Alzheimer es una
forma de demencia). Además, la función cognitiva muy pobre y un mayor riesgo de
demencia vascular ha sido relacionado con un menor consumo de productos de
leche o productos lácteos, sin embargo, deben evitarse todos los productos
lácteos enteros con grasa. Con todo no se equivoca con carnes magras, como
pollo y pescado, verduras frescas y frutas y un limitado consumo de azúcares y
grasas.
Avive su
cerebro con estimulación mental
Probablemente ha visto los anuncios de Lumosity, un
sitio en línea de entrenamiento cerebral que promueve los juegos de estrategia
cerebrales para mantener una mente aguda. Es este tipo de juegos que se
proponen para mejorar la cognición. Otras ideas incluyen aprender una nueva
habilidad -- tal vez un nuevo idioma o un instrumento musical; o tomar una
clase, como reveló un estudio que una educación formal disminuye el impacto de
la enfermedad de Alzheimer.
Sea una mariposa social
Según el National Institute on Aging, las
investigaciones indican que participar en actividades sociales y productivas,
como tomar una clase de arte o ser voluntario en su comunidad, puede disminuir
el riesgo de desarrollar problemas de salud, incluyendo la demencia. Aunque los
investigadores encontraron una relación entre la actividad social y una mejor
función cognitiva, no está claro si la cognición mejorada es resultado de la
interacción social misma o de factores relacionados, tales como el aumento
estimulación intelectual, que generalmente acompaña a la interacción social.
La investigación
también sugiere que quienes son sociables y orientado a objetivos, pueden ser
más felices y menos depresivos que otros. A menudo son jubilados con un
presupuesto limitado, pero hay un montón de actividades sociales gratis como
unirse a un club de lectura o grupo de caminantes. Si usted vive en la
comunidad de jubilados, generalmente ofrecen eventos cotidianos, para elegir algunos
que le interesen.
‘A moverse’
La actividad
física es buena para usted no importa su edad, pero según la Alzheimer’s Association, el ejercicio
también está asociado con un menor riesgo de deterioro cognitivo. Entonces, si
la actividad física es algo que es capaz de hacer, intente algo cardiovascular para
levantar su ritmo cardíaco. Esto aumenta el flujo sanguíneo al cerebro y reduce
los factores de riesgo que causan demencia, tales como presión arterial alta,
diabetes y colesterol alto. Nota: Consulte
siempre con su médico antes de comenzar cualquier nuevo programa de ejercicios.
To Your
Health
April, 2015 (Vol. 09, Issue 04)
April, 2015 (Vol. 09, Issue 04)