lunes, 30 de marzo de 2009

Esta es conocida como plegaria  del viento Navajo, pero realmente está dirigida a las mujeres con gran reverencia y amor. Compártalo con una mujer que usted conozca, de modo que ella pueda recordar de caminar con su cabeza en alto, orgullosa con el conocimiento de su fuerza y belleza verdaderas.

OHKWA'HO AKA'RA

Oración al Viento Dine (Navajo)
por Wolfeyes

 

Oh, Gran Espíritu, Oh Abuelos,

¿Cuán afortunado puede ser uno de conocer esta belleza?

Uno puede buscar en el mundo y no encontrar tanta delicadeza.

Su corazón es puro, irradia amor y calidez.

Oh, Madre Tierra, ha surgido de tu útero.

Tiene que ser así, ya que la luz de su belleza la veo por todas partes.

 

Oh, Viento navajo, sé suave en este desierto rosado.

Abrázala siempre con tus cálidas brisas apacibles.

Colma su corazón con orgullo y felicidad

Ella es de un pueblo poderoso y noble.

 

Tiernos recuerdos murmura a su oído:

“Jamás olvidar…

Jamás olvidar.”

 

Oh, Padre, Sol navajo,

Brilla vivamente aquí en su sendero,

Propicia que vea la belleza en sí misma así como en los otros.

Protege y mantén su tiernísimo calor.

Cuando te ausentes, ocúltala de la desesperanza de esta vida.

Permítele siempre caminar hermosamente.

Oh, Mujer que camina tan bella como la noche,

Soy un amigo atento y callado.

Dedicado a ti, siempre.

domingo, 15 de marzo de 2009

UNA CARICIA EN EL ALMA

Khalil Gibran

El Matrimonio, Maestro ¿Qué puedes decirnos sobre el matrimonio?

El maestro respondió diciendo:

“Juntos nacieron y juntos estarán para siempre.

Que los vientos del cielo puedan dibujar sus deseos a través de ustedes.

Estarán juntos cuando el batir de las alas blancas de la muerte esparza vuestros días.

Sí, estarán juntos como un murmullo en la memoria silenciosa de Dios.

Pero dejen en libertad al corazón de su unión.

Dejen que haya espacios en vuestra cercanía.

Y dejen que los vientos del cielo dancen entre ustedes.

Ámense el uno al otro pero no hagan del amor una atadura.

Que sea más bien como el movimiento de un océano que se extiende entre las orillas de sus almas.

Llénense el uno al otro sus copas, pero no beban de la misma copa.

Dense el uno al otro el pan, pero no coman del mismo pedazo.

Canten, bailen y gocen juntos, pero que cada uno de ustedes sea independiente.

Como las cuerdas de un laúd, que, aunque están separadas, tiemblan con la misma música.

Den su corazón, pero no para que el otro lo posea.

Porque solo la mano de la vida puede contener sus corazones.

Estén juntos, pero no demasiado juntos.

Pues aun los pilares del templo están separados entre si.

Y ni el roble ni el ciprés crecen el uno a la sombra del otro”.

SENCILLA ORACIÓN 

AL ALIMENTAR A NUESTRO CUERPO:

 

Reconozco que eres el templo en el que mi espíritu y energía creadora moran.

Yo te he creado desde mi necesidad de tener mi espíritu manifestado en la tierra y pueda esta vez  poder aprender y crecer.

Te ofrezco este alimento para que puedas seguir sosteniendo mi energía creadora, mi espíritu, mi alma.

Yo te ofrezco este alimento con amor, y con el deseo sincero para que te encuentres libre de enfermedades y de discordia.

Te acepto como mi propia creación.

Te necesito.

Te quiero.

 

Seres de luz, 

por Leonardo Boff

Posted: 22 Feb 2008 11:41 AM CST

La luz es uno de los mayores misterios del universo. Solamente entendiéndola a la vez como partícula material y como onda energética podemos comprenderla más o menos adecuadamente. Hoy sabemos que todos los seres vivos emiten luz, biofotones, a partir del ADN de las células. Por eso todos irradian una cierta aura.

No sin razón la luz y el sol se han convertido en símbolos poderosos de todo lo que es positivo y vital. Especialmente el sol radiante es visto como el gran arquetipo del héroe y del luchador que vence las tinieblas con los monstruos que eventualmente se esconden en ellas. Su aparición cada mañana no es una repetición, sino que cada vez es una novedad, pues siempre es diferente. Es un teatro cósmico que comienza da cappo, como si Dios dijese al sol cada mañana: «Vamos, ¡hazlo otra vez! ¡Vuelve a nacer! Irradia tu luz sobre todos y en todas las direcciones».

En la mayor parte de los pueblos existía el temor de que el sol tal vez pudiese ser tragado por las tinieblas y no volviera a nacer y a iluminar la Tierra y a cada uno de nosotros. Se crearon rituales y fiestas que celebraban la victoria del Sol sobre las tinieblas. Por ejemplo, la fiesta romana del Sol Invictus, del «Sol Invencible», que posteriormente dio origen a la navidad cristiana, la fiesta del nacimiento de Dios encarnado, llamado «el Sol de Justicia». Las fiestas de junio con sus hogueras tienen tras ellas la experiencia del sol, pues tiene lugar el solsticio (de invierno en Sur, de verano en el Norte).

Se tenía, y se tiene todavía hoy la experiencia emocionante de que el Sol, con sus rayos de luz, nace como si fuera un niño. A medida que sube en el firmamento va creciendo como un adolescente hasta llegar a la edad adulta al mediodía. Por la tarde va languideciendo y envejeciendo, hasta morir tras la línea del horizonte. Pero, pasada la noche, vuelve a nacer, limpio, brillante, sonriente como un niño. ¿Cómo no celebrarlo festivamente? ¿Cómo no entenderlo como signo de la Realidad origen de todas las cosas?

De hecho, es una imagen poderosa de Dios, como lo cantó san Francisco en su «Cántico al Hermano Sol». Ninguna metáfora de la divinidad es más poderosa que la de la luz y la del Sol. La experiencia misma de la luz hizo surgir la palabra Dios. Ésta deriva de la palabra di del sánscrito, que significa brillar e iluminar. De di viene «día» y «Dios», como expresión de una experiencia de luz y de iluminación. Como dice san Juan: «Dios es luz» (1Jn 1,5). Como dice san Pablo, «Él habita en una luz inaccesible» (1Tim 6,16). Jesús se autopresenta como luz: «Yo, la luz, he venido al mundo para que todo el que crea en mí no ande en las tinieblas» (Jn 12,46). El Verbo encarnado es «vida y luz de los seres humanos», «luz verdadera que ilumina a toda persona que viene a este mundo» (Jn 1.4.9). Con razón es presentado por eso como «la luz del mundo» (Jn 9,5). Los que siguen a Cristo como luz deben vivir «como hijos de la luz» (Ef 5,8). Y «el fruto de la luz es todo lo que es bueno, justo y verdadero» (Ef 5,9). Más aún, cada seguidor debe ser también «luz del mundo» (Mt 5,14).

Como tan bien reza la liturgia de los funerales: «Que las almas de los fieles difuntos no caigan en las tinieblas, sino que el arcángel San Miguel las conduzca a la luz santa. Y brille sobre ellos la luz perpetua».

Todos nosotros somos seres de luz. Fuimos formados originalmente en el corazón de las grandes estrellas rojas, hace miles de millones de años. Llevamos luz dentro de nosotros, en nuestro cuerpo, en el corazón y en la mente. Sobre todo, la luz de la mente nos permite comprender los procesos de la naturaleza y penetrar en lo íntimo de las personas, hasta en el misterio luminoso de Dios. 


Fuente: Koinonia

sábado, 14 de marzo de 2009


Vicente Merlo: "Sé psiconauta: viaja a tu conciencia"

Posted: 13 Mar 2009 11:34 AM PDT

Imparte la primera asignatura de meditación en una universidad y defiende su práctica en el ámbito escolar y familiar.

--¡Pues qué bien!: la meditación ya es asignatura universitaria.
--Sí, lo es por primera vez y debería serlo en todas las universidades. La asignatura tiene una dimensión teórica y práctica. Hay muchos tipos de meditación y tienen un sentido distinto en la tradición hindú, en la budista, en la musulmana y en la cristiana.

--¿De qué estamos hablando?
--Antes que nada, quiero dejar claro que la meditación no es una reflexión racional. Se trata de descubrir un estado de consciencia en el que la reflexión y el movimiento de pensamientos han cesado.

--El silencio interior.
--Sí. Se trata de descubrir un silencio interior de una riqueza que aquí ni nos imaginamos. Occidente se ha volcado hacia el exterior: hemos lanzado astronautas al espacio exterior, pero nos hemos olvidado de ser psiconautas. Sé psiconauta, viaja a tu conciencia.

--Vale. ¿Qué paisajes encontraré?
--Aquí entramos en el corazón de la paradoja. Por un lado, no hay nada, porque, si no, no hay silencio. Por otro lado, los paisajes son de una riqueza tan impresionante que no los podemos imaginar hasta que no buceamos en este océano interior. Hay campos de conciencia y energía muy distintos, matices y tonalidades del silencio muy distintos. Campos de conciencia y energía vibrando a una frecuencia más acelerada.

--¿Y cómo nos sentimos?
--Con una sensación de plenitud que no sentimos en la vida cotidiana.

--¿Meditando encontraremos quiénes somos en esencia?
--Depende de la tradición. Nuestra tradición occidental es muy esencialista: desde Platón, hemos buscado la esencia de la realidad y del ser humano, y nos equivocábamos.

--¿En qué sentido?
--Entendíamos como esencia algo permanente que no cambia. Eso contrasta con la tradición budista, que se asemeja al pensamiento posmoderno, en el sentido de negar que exista algo que permanezca siempre siendo lo mismo. Todo es un proceso en constante movimiento. No hay una esencia estable, fija.

--¿Qué ganarán sus estudiantes universitarios con la meditación?
--Ecuanimidad, claridad mental, capacidad de concentración. Me sorprende que no se enseñe en las escuelas y familias. Hay muchos estudios científicos que ponen de manifiesto los enormes beneficios de la meditación para la salud. Sintetizando, diría que, a nivel físico, de entrada, conseguirán una relajación considerable. Estamos llenos de tensiones musculares.

--¿Y a nivel emocional?
--Con la meditación armonizamos nuestros sentimientos y experimentamos una paz y una felicidad serena de una calidad distinta.

--¿Y a nivel mental?
--Lo primero que sucede es que uno descubre el caos y la agitación impresionante en que vivimos. Luego la mente empieza a calmarse y descubrimos una serenidad, un silencio mental, una amplitud de conciencia extraordinaria. Y hay un último nivel: el descubrimiento de esa realidad profunda, de ese ser esencial, el atman, nuestro ser profundo.

--¿A usted nada lo altera?
--Lo que uno va intentado hacer es llevar el estado de meditación a la vida cotidiana. Durante la meditación, estoy acostumbrado a ver surgir cualquier emoción y pensamiento positivo o negativo, y me acostumbro a sentirme distante y distinto de ellos. Cuando veo que surge en mí una emoción negativa, no me pierdo en ella. La constato, la observo, soy testigo imparcial.

--¿Y si alguien le insulta?
--Si alguien nos llama imbéciles, inmediatamente reaccionamos, nos enfadamos. Con la meditación aprendemos a dejar de identificarnos con todas las emociones y pensamientos que vemos surgir. En la vida cotidiana estamos embotellados en las emociones y pensamientos automáticos.

--Una meditación para no iniciados, por favor.
--15 o 20 minutos en un lugar tranquilo, haciendo silencio interior, tomando un punto de concentración, como la respiración. Una vez al día. Simplemente, permanecer despiertos, familiarizándonos con nuestro espacio interior.

--¿Y la postura?
--No tenemos que ser rígidos. Podemos estar en una silla. El objetivo es bucear en la conciencia, y el cuerpo queda en segundo plano. Es posible meditar de pie o corriendo.

--¿Es usted diferente de cuando no meditaba?
--Sí. La mayor sorpresa ha sido el descubrimiento de un espacio interior tan amplio, gozoso y luminoso, que yo lo definiría como la experiencia de un estado de plenitud. En ese momento no deseas absolutamente nada ni temes a nada.


Fuente: Entrevista de Gaspar Hernández en El Periódico (12/03/09). Foto: Marina Vilanova
Vicente Merlo es doctor en Filosofía, profesor asociado en la Universidad de Barcelona, conferenciante y escritor.

miércoles, 11 de marzo de 2009

"Todavía no ha cambiado de paradigma?"

Posted: 10 Mar 2009 12:06 PM PDT

ENTREVISTA: Carreras & capital humano EDWARD DE BONO Experto en pensamiento creativo

El premio Nobel de Física, Albert Einstein (1879-1955) afirmó que "no puede resolverse un problema pensando de la misma forma que cuando fue creado". De ahí que la crisis económica actual requiera que la sociedad en general y los empresarios en particular aprendan a pensar de una manera diferente para encontrar una solución eficaz y sostenible en el medio plazo.

Éste es el campo de investigación y divulgación del doctor Edward de Bono (Malta, 1933), prolífico escritor, psicólogo por la Universidad de Oxford y reconocido experto mundial en técnicas de pensamiento creativo e innovador, como los Seis sombreros para pensar y elPensamiento lateral. Recientemente ha participado en la reunión anual de ex alumnos de EADA, donde aseguró que "el cambio climático no es la principal amenaza de la humanidad, sino la estrechez de nuestro pensamiento".

Pregunta. ¿Qué ha averiguado acerca del funcionamiento de la mente?

Respuesta. La mente humana es un instrumento complejo y muy poderoso. Si no se utiliza adecuadamente genera malestar, ineficacia y, en definitiva, resultados pésimos, tal como estamos viendo hoy en día. Se sabe que nuestro cerebro es experto en crear patrones de pensamientos rutinarios, casi mecánicos. Pero no es muy bueno cambiándolos. Por eso nos cuesta tanto gestionar las crisis, que son tan necesarias para introducir cambios y poder así evolucionar.

P. ¿Y por qué cuesta tanto cambiar?

R. Porque somos y pensamos tal y como nos han condicionado desde pequeños. Una vez conformado nuestro sistema de creencias y, por ende, nuestro concepto de identidad, empezamos a pensar y a percibir la realidad de forma estandarizada y subjetiva, limitando las infinitas posibilidades que cada instante ofrece. Independientemente de lo que nos suceda, si experimentamos malestar es que nuestra interpretación del hecho en sí es limitada y, por tanto, equivocada. La negatividad es un síntoma de falta de imaginación y creatividad. No sirve absolutamente para nada.

P. Todo se reduce a una cuestión de percepción...

R. Si cambia nuestra percepción por medio del pensamiento, cambia por completo nuestra visión de la realidad. Y, como consecuencia, también cambia nuestra actitud, nuestro comportamiento y nuestra manera de relacionarnos con los demás y con el entorno del que todos formamos parte. Así, es imposible que cambie nuestra conducta si no cambiamos primero nuestra manera de pensar y nuestras creencias. Aunque muchos siguen aferrándose a su zona de comodidad, donde se encuentran sus viejos hábitos, algo se está cociendo lentamente en nuestra sociedad. La pregunta que uno debe hacerse es: ¿todavía no he cambiado de paradigma?

P. ¿A qué se refiere?

R. Ahora mismo, el gran reto que exige el mundo es que la humanidad cambie de paradigma, es decir, que cambie nuestra manera de ver y de interactuar con la realidad, aprendiendo a diseñar el futuro en consonancia con nuestros verdaderos valores y necesidades humanas. No podemos seguir funcionando desde nuestro egoísmo y egocentrismo. Es hora de funcionar desde el "nosotros", desde la cooperación y el altruismo, a partir de lo que podemos crear verdadero sentido a nuestra existencia.

P. Sin embargo, la crisis parece haber acentuado el miedo, la negatividad y la lucha por la supervivencia...

R. Puede ser. Pero, ¿de qué sirve temer algo que todavía no ha sucedido? ¿Qué beneficios me comporta ser negativo? Toda la energía que no destinamos a construir nos destruye. Por eso ir en contra de algo no tiene ninguna utilidad. Lo que funciona es el diseño y la creación de alternativas útiles y eficaces orientadas a la resolución de conflictos y problemas. Y no hay nada que genere mayor creatividad que ver las cosas tal como son en vez de como nos gustaría que fueran. Sin embargo, la mayoría de la población no es dueña de sí misma, de sus pensamientos, de su perspectiva. Y el cansancio derivado de su impotencia les esclaviza a reaccionar impulsiva y negativamente por pura inercia, perdiendo oportunidades para crear bienestar y valor añadido.

P. ¿Y qué ocurre dentro de las empresas?

R. Lo mismo que fuera de ellas. La gente se niega a aprender de las cosas que le va sucediendo en la vida, con lo que sigue estancada, lo que le impide crecer y mejorar. Y esto es extrapolable a las empresas. La insatisfacción de los colaboradores es sólo un indicador de que hace tiempo que las cosas tendrían que haber cambiado. Pero hasta que no cambie la mentalidad de las personas, todo permanecerá igual. Es una ley eterna e inquebrantable.

P. ¿En qué consisten sus seminarios para empresarios?

R. Simplemente dedicamos tiempo y espacio para aprender a pensar de forma consciente, lo cual es una cuestión de compromiso y entrenamiento. El objetivo es reprogramar nuestra mente con información basada en la sabiduría. Sólo así es posible cambiar nuestro sistema de creencias y, en consecuencia, empezar a interpretar la realidad de forma menos egocéntrica y mucho más objetiva, potenciando nuestro bienestar emocional y nuestro talento para la innovación y la creatividad.

P. ¿Y cómo se consigue?

R. Con esfuerzo y disciplina. De lo que se trata es de fomentar que el acto de pensar sea voluntario, consciente y sostenido, enfocándonos en todo aquello que sea positivo, creativo y constructivo. En el fondo, nadie quiere pensar de otra manera, pero se resignan por falta de competencia. Las personas más inteligentes que he conocido juegan con su pensamiento, pues son conscientes de su increíble potencial creador. Lo que usted crea es el resultado de lo usted que cree. Piense en ello.

Fuente: Diario El País
Edward de Bono en Wikipedia

miércoles, 4 de febrero de 2009

La Risa como Práctica Yóguica

El objetivo del yoga es la felicidad – el objetivo mismo de la vida

“El camino al cielo debe de ser en sí el cielo” - Santa Catarina de Siena

Es fácil estancarse en hábitos negativos que nos apartan de la felicidad, que es nuestra verdadera naturaleza. Las prácticas de yoga nos ayudan a domar esos hábitos al hacernos conscientes de ellos. Cuando practicas ásanas, puedes sentir una resistencia a la felicidad. Tus tendencias de enojo, avaricia, celos y tristeza pueden expresarse como dolor o rigidez en tu cuerpo, y como confusión, duda y preocupación en tu mente. Nuestros cuerpos son como almacenes de experiencias pasadas (karmas). Las memorias, que disparan las emociones, no sólo existen en compartimientos con archivos ubicados en el cerebro, sino que también están guardados en todo el cuerpo: órganos internos, sangre, músculos y huesos, células y tejidos. Como dice el experto en neurología Candace Pert, “El cuerpo no sólo existe para llevar la cabeza de un lado a otro”. La mente y el cuerpo no sólo están conectados –están hechos de la misma materia, pero aparecen en densidades distintas. La consciencia, o el principio de conocer, cubre todo el cuerpo y la mente.

La práctica de ásanas no sólo impacta los músculos externos y las articulaciones, sino también los órganos, tejidos profundos, glándulas, sangre y fluidos, ayudando a que éstos eliminen toxinas. Una persona sana puede experimentar una amplia gama de emociones y no sentirse afectada por ellas, dada su capacidad de procesar dichas emociones. Pero cuando estamos sobrecargados y no podemos digerir nuestras experiencias sensoriales, estos sentimientos se vuelven tóxicos y se quedan atrapados en los tejidos físicos. Las emociones se pueden almacenar en lo más profundo de nuestros órganos. Los sentimientos que no se expresan y las emociones negativas que llevan mucho tiempo reprimidas pueden crear un corto circuito en el sistema de cuerpo-mente, resultando en un estado debilitador de mal-estar. El miedo y la ansiedad pueden filtrarse al intestino grueso. El enojo se almacena en el hígado. La avaricia se enraíza en el corazón.

La risa es una antigua técnica yóguica de sanación que puede ayudar a eliminar emociones negativas profundamente almacenadas. Tiene un gran valor terapéutico para restaurar el estado de bienestar y salud, que conduce a la felicidad. La risa induce la relajación, por su habilidad de liberar al cuerpo y a la mente de emociones reprimidas que obstaculizan la auto-reflexión, un poderoso requisito a la meditación. La risa espontánea es buena, pero cuando las emociones han sido enterradas por tanto tiempo y se han vuelto ya una tensión que yace en lo más profundo, la práctica consciente de risa puede sanar mucho.

 La ásana conocida como hasahásana (sonrisa-ásana)* puede ayudar a inducir la risa. Acuéstate boca arriba y levanta tus brazos y piernas hacia el cielo. Flexiona los pies y las manos, dobla la rodilla derecha al mismo tiempo que doblas el codo derecho, después cambia de lado, continúa alternando el movimiento hasta que la risa te inunde… y continúa riéndote. A medida que continúes riéndote, quizás sientas que quieres echarte al piso y moverte sobre él. Hazlo. Si la risa no fluye, intenta gritar “Ja, Ja”, o “Yuuupiii” o “Yiiiijaaa” en voz alta, o simplemente empieza a murmurar palabras sin sentido para que se dispare la risa. Deja que todo tu cuerpo se retuerza de risa sin motivo alguno, y trasciende entonces la razón y el pensamiento. Estar en un cuarto con otras personas que hacen lo mismo ayuda, porque la risa tiende a ser contagiosa.

Después de hacer esta práctica por unos 5-10 minutos, siéntate en postura de meditación, sin moverte. Deja que los sentimientos que surjan lleguen y se vayan. Puede ser que empiecen a fluir lágrimas, y quizás inunden tu sistema. Deja que las lágrimas fluyan. Deja que esta limpieza se lleve a cabo siendo un fiel testigo, sin juicios ni excusas. Siéntate así unos 5-10 minutos. Después relájate en shavásana y practica una relajación guiada y consciente de cada parte de tu cuerpo, comenzando con los dedos de los pies y continuando hacia arriba por todo el cuerpo, hacia la cabeza. Después profundiza: empieza con los órganos internos, siguiendo hacia arriba el modelo de los chakras –relaja los órganos de eliminación, los órganos de sexualidad, los órganos de digestión, los órganos de circulación de la sangre, los órganos de respiración, los órganos de percepción y finalmente los órganos de pensamiento.

 Después de practicar la meditación de la risa por un mes, te sentirás revivido(a), fresco(a), sin cargas y limpio(a), con un renovado sentimiento de equilibrio, que conduce a la ecuanimidad de la mente, y a la iluminación.

 

 

-Sharon Gannon, enero de 2009

 * Ver The Art of Yoga, por Sharon Gannon y David Life, pág. 64.


Savasana o Postura del cadáver


EJECUCION: Extendido boca arriba, en el suelo, con los pies algo separados entre sí; posición perfectamente natural con los brazos también algo separados del tronco y los dedos un poco doblados, con naturalidad. Haga dos o tres respiraciones completas con la clara idea en la mente de que ahora usted se va a relajar por completo.

Acto seguido afloje todo el cuerpo anulando la fuerza de todos los músculos; empiece por los brazos y las piernas; prosiga con el vientre y el pecho, la cabeza, el cuello y la lengua y finalmente afloje el interior de la cabeza. Vaya haciendo este relajamiento progresivo con calma, en el momento de las exhalaciones. Procure que su conciencia quede en todo momento bien despierta, dándose perfecta cuenta de lo que está haciendo.

Una vez consiga esta relajación muscular, lo que puede requerir bastantes días de prácticas, procure, entonces y no antes, disminuir el flujo de ideas e imágenes que vienen a la mente, sustituyéndolas por la noción general de clama, tranquilidad y descanso.

Después de repetidos ensayos, si persevera pacientemente, verá como consigue este especial estado de profunda tranquilidad y de serena alegría, que es la indicación de que ha llegado a un grado muy apreciable de relajación integral.

Aunque no hay inconveniente en prolongar la duración del Savasana, al principio es mejor no pasar de 10 o 15 minutos. Después, poco a poco, puede ir aumentando el tiempo hasta media hora. Se practica siempre al final de los demás asanas.

Esta postura es considerada por los maestros del Yoga como el más difícil de los asanas. Para poder relajar consciente y voluntariamente toda la musculatura, es preciso haber adquirido antes el completo dominio del cuerpo y también el de la mente. Hay muchas personas que intentan en vano conseguir relajar la mente y permanecer tranquilas durante unos minutos, hasta que al fin, cansadas de los repetidos intentos, abandonan la prueba dándola por imposible. Efectivamente, no se puede llegar sin más preparación que la buena voluntad a calmar la mente y a relajar profundamente el cuerpo. Es preciso un adiestramiento progresivo y constante.

Las posturas del Yoga, por el hecho de hacer tomar conciencia, poco a poco, de los grupos musculares, que normalmente permanecen en el plano subconsciente, facilitan el poderlos aflojar con más facilidad en el momento de practicar este asana de relajación general.

 

 

www.visionysentido.org